Puentes de Hamaca
Reseña
Durante la primera mitad del siglo pasado en Costa Rica se construyeron bastantes puentes colgantes que permitieron el acceso a zonas que se encontraban aisladas del resto del país.
Algunos de esos puentes se han perdido por diferentes circunstancias, como sobrecargas, socavado de bases, cabezas de agua o anegamiento por proyectos hidroeléctricos; sin embargo aún contamos con una buena cantidad de ellos, los cuales en su mayoría sobrepasan los setenta años de construidos.
Muchos presentan grabados o placas que hacen alusión a los períodos gubernamentales de don Ricardo Jiménez Oreamuno, los cuales coincidieron con la época de ayudas a la región hechas por Estados Unidos, que en varios casos brindó el impulso necesario para su construcción.
Características
Básicamente un puente colgante (o de hamaca) se compone de:
- Anclaje: es el punto situado en cada una de las orillas donde los cables se «sujetan» al suelo, es aquí donde se brinda a los cables principales la tensión adecuada.
- torres o postes: son los elementos estructurales que brindan la mayor altura a los cables y a la vez sirven para distribuir la carga.
- cables principales, van de poste a poste a todo lo largo del puente mismo, uno a cada lado del puente, deben tener la misma forma y tensión.
- tirantes: que son los cables verticales que unen el piso del puente con el cable principal.
- piso, es la parte del puente que utilizan los vehículos y personas para apoyarse, puede ser de madera o lozas, pero no debe ser excesivamente pesado para no aumentar el peso mismo del puente.
Descripción
Con la siguiente recopilación se pretende describir brevemente algunas de estas estructuras colgantes, que más que simples elementos de nuestras infraestructura vial son verdaderas joyas históricas que sirvieron de pilares en el desarrollo económico y social de vastas regiones.
Existen muchísimos puentes colgantes para peatones, cuya descripción sería interminable, razón por la que únicamente incluyo los que presentan dimensiones y características que permiten la circulación vehicular por ellos.
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Río Peñas Blancas: ubicado en la carretera que une San Ramón de Alajuela con la Fortuna de San Carlos, es quizás el más impresionante de todos, por su tamaño, forma y entorno escénico, a él se llega desde San Ramón, por los sectores de Bajo de los Rodríguez y La Tigra, o desde San Carlos por los sectores de Jabillos o San Isidro. Actualmente se le utiliza con mucha frecuencia para actividades turísticas, por lo que no es raro ver desde el puente a personas que recorren el río en balsa, kayak, o que en sus orillas acampan, se bañan y almuerzan, cerca del puente hay un espaldón donde se practica el descenso a rapel.
Desde el puente se aprecia río arriba la exuberante vegetación de las montañas que forman las estribaciones de las Reservas Biológicas que le circundan.
Debido a problemas estructurales, en una de sus entradas se construyó un arco de cemento que evita la circulación de vehículos pesados y autobuses.
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Río La Estrella: este es quizás el puente de hamaca costarricense que está en mejor estado y con mantenimiento constante; es definitivamente el que hoy soporta mayor cantidad de tránsito pesado, pues sirve de enlace al Valle de La Estrella, una de las zonas de mayor producción bananera del país, lo que le convierte en vía estratégica; su mantenimiento lo brinda Dole (Standard Fruit Co.), propietaria de las fincas, a sus orillas se encuentran los pueblos de Pandora y Guaria.
Hoy este puente presenta un llamativo color rojo, y aunque su piso y tirantes dan apariencia de uno tipo «Bailey«, sigue siendo estructuralmente un puente colgante, en él llama la atención lo caudaloso del río que cruza, pues este río sirve de descarga no solo al sector de La Estrella, sino también a gran parte de la cercana cordillera de Talamanca, la Reserva Indígena del Alto Cuén y la Reserva Biológica Hitoy Cerere.
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Río Pacuare: Puente ubicado en el sector de Bajo Pacuare, permitió el acceso a los sectores de Grano de Oro y Moravia de Chirripó, así como a infinidad de poblados indígenas del Alto Talamanca. Para llegar a él se debe partir de Turrialba, pasando por los poblados de La Suiza, Tuis, Tayutic, y Jicotea, para luego iniciar un fuerte descenso hasta Bajo Pacuare.
Este puente es un excelente lugar para pasear, pues bajo él encontramos un río caudaloso de aguas cristalinas, que en este punto precisamente sale de la montaña, se puede pescar y con un poco de cuidado bañarse en sus playones, se encuentra rodeado de dos altos espaldones, uno de los cuales está cubierto de vegetación primaria, mientras que el otro, deforestado y con múltiples cultivos como café, pejibaye y plátano.
El puente presenta una característica particular: debido a deficiencias estructurales, cuando los vehículos ingresan a él genera un fuerte chillido que pone nervioso a cualquiera, sin embargo no es un problema mayor, y por aquí circulan camiones de tamaño mediano.
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Río Barranca: Al circular por la recta de Macacona en Esparza encontramos la entrada a San Jerónimo, al tomar esta calle con rumbo norte, luego de un descenso llegaremos a un hermoso puente colgante que atraviesa el río Barranca, sirve de comunicación a los poblados de Cerrillos y Peñas Blancas, entre otros; este pequeño cañón del Río es muy visitado por los Esparzanos en los días de verano, para bañarse en las pozas ubicadas bajo el puente, sin embargo ello requiere precaución pues la cercanía de las montañas de San Ramón hace que puedan darse crecidas inesperadas.
El puente aunque aun existe fue sustituido por uno tipo «bailey» y actualmente solo es de uso peatonal.
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Río Tárcoles (Paso Agres): Este largo y angosto puente cruza el principal desaguadero del Valle Central, otrora fue un apetecido lugar de turismo regional, pero hoy, debido a la alta contaminación del río Tárcoles, es imposible pensar en un chapuzón aquí. Actualmente el tránsito por el puente aumentó considerablemente debido a que la carretera entre San Juan de Mata y Turrubares se asfaltó recientemente, conviertiéndola en una excelente vía de escape de Orotina a Puriscal, especialmente cuando se dan congestionamientos en el Aguacate y Cambronero, para llegar a este puente nos desviamos de la carretera principal de Orotina hacia el oeste. La característica más destacable es que los anclajes son muy anchos, reduciendo el espacio de entrada al puente, por lo que los camiones no pueden circular por él, no porque la estructura no los soporte, sino porque se quedarían atorados a la entrada.
Nota: Este puente ya no existe. Se cayó con el paso de un bus y fue sustituido.
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Río Grande de Orosi (Palomo): Este puente fue todo un hito histórico en el siglo pasado, anunciaba la llegada al balneario de aguas termales de Palomo, muy visitado en su época por los josefinos, quienes gustaban de bañarse en las tibias piscinas para luego hacerlo en el río de frías aguas cristalinas; manso en verano, pero que todos los inviernos genera algún susto al poblado de Palomo y a algunos barrios de Orosi.
Está ubicado pocos kilómetros después de Orosi, y permite no sólo la comunicación con Palomo, sino también completar la vuelta al embalse de Cachí, razón por la que su importancia turística sigue vigente. Hoy este puente no está en buen estado, por lo que se habla de cambiarlo por una estructura diferente.
- Río Grande de Orosí (Tapantí): a mi criterio uno de los puentes medianos más atractivos, cuando se construyó se hizo con la intención de comunicar Orosí con el sector de Taus y Pejibaye, sin embargo, con la construcción del camino por Tucurrique, esta ruta quedo casi en total abandono, siendo hoy un camino sólo para doble tracción, incluso a orillas del río, junto al puente lo que queda son los cascarones de cemento de lo que alguna vez fue un grupo de casas de habitación. En los últimos años la circulación por este puente volvió a aumentar, debido a la construcción al otro lado del río de toda la infraestructura de recepción turística del Parque Nacional Tapantí, lo que sin lugar a dudas le devolvió la vida al puente.
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Río Pejibaye: Permite la comunicación directa de Tucurrique con Atirro de Turrialba, ubicado en un cañoncito con densa vegetación, es punto de partida para turistas que gustan de navegar en balsa, hoy sirve de enlace a sectores agrícolas, en los que se cultiva principalmente macadamia, caña de azúcar y pejibaye; sin embargo está en un sector que sufrió grandes cambios, debido a la entrada en marcha del proyecto hidroléctrico Angostura.
Nota: Este puente ya no existe. Por su peligrosidad fue sustituido por otro tipo bailey.
- Río Pirrís (Tarrazú): Es, sin menospreciar la importancia de sus hermanos, el puente de hamaca que a través de la historia generó el mayor crecimiento económico para una región específica, pues por él transitó el desarrollo cafetalero de los cantones Tarrazú y Dota. Está ubicado precisamente a la entrada de San Marcos de Tarrazú, sobre un pequeño cañón, en el que más de uno gusta detenerse a admirar el paisaje, hoy se le han hecho algunas mejoras estructurales, y se restringe el paso a un solo vehículo a la vez, sin embargo, se espera que siga en pie por muchos años más, sirviendo a la comunidad de Los Santos.
- Río Tárcoles (Quebradas): Es un puente de hamaca cuyos anclajes en uno de sus márgenes son «casi naturales», pues está construido en un cañón de piedra muy cerrado, lo que permitió literalmente montar el puente en esta estructura natural, presenta como característica particular una gran inscripción en relieve que dice «Administración Ricardo Jiménez» y que evoca la época de oro del Tárcoles, cuando era el río llamado a alimentar de energía hidroeléctrica al floreciente «Ferrocarril Eléctrico al Pacífico», hoy este puente comunica Escobal de Atenas con San Pablo de Turrubares, que se corta por la vía San José-Caldera, que transformó la infraestructura vial de la zona.
- Río Corobicí (Bebedero): Este puente sirve de punto final al recorrido en balsa por el caudaloso río Corobicí, desaguadero al Pacífico del embalse de Arenal, se encuentra ubicado poco antes del ingreso al pueblo de Bebedero de Cañas, y permite a sus pobladores comunicarse con Bebedero de Bagaces, es sin embargo una estructura poco utilizada, debido a que la zona de importancia económica está a este lado del puente, y además en el otro sector tampoco hay sitios de interés turístico particular.
- Río Tibás: Es quizás uno de los puentes de hamaca más conocidos por la gente de la capital, debido a que al construirse la ruta Braulio Carrillo se convirtió en excelente vía alterna de San José a Santo Domingo y Heredia. Comunica directamente los sectores de Barrio el Socorro y Santo Tomás de Santo Domingo, por un cañón cubierto de cafetales. Presenta problemas estructurales que sumados al aumento de tráfico generaron la necesidad de prohibir el paso de vehículos pesados y restringir a un solo vehículo a la vez, condición que en las horas pico no es respetada.
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Otros puentes: existen otras estructuras colgantes aún en pie que menciono brevemente, debido a que su importancia relativa es poca, sea porque están en rutas que quedaron en desuso o porque se utilizan sólo para casos muy específicos.
- Río Limón: comunica Paso Real con Chánguena.
- Río Puerto Viejo: en Horquetas de Sarapiquí.
- Río Barú: puente viejo en Dominical.
- Río Pirrís (pozo Azul): comunica Parrita con Sabanillas de Acosta.
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Puentes caídos: Algunos de los puentes de hamaca que ya no están con nosotros debido a diferentes motivos son:
- Upala: se cayó porque un camión maderero lo sobrecargó y se fue de lado, se cambió por uno de metal.
- Chires de Parrita: se lo llevó el río, hoy hay uno de metal.
- Arenal Viejo: anegado por el embalse, alguna gente me dice que no era de hamaca, sino de metal (nunca lo conocí).
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